Siempre
escuché durante los catorce años que llevamos mi esposa y yo viviendo en
California, que el parque Nacional Yosemite era una de las maravillas del mundo.
Se nos dijo que allí la naturaleza reúne las más poderosas energías del
universo que son transmitidas físicamente a las emociones humanas por el solo
hecho de estar presentes alli.
Muchas
dificultades se nos presentaron durante ese tiempo que hicieron parte de los motivos
para no haber ido porque Yosemite se encuentra a siete horas de distancia de Redondo Beach que es el lugar donde habitamos y desde donde se toma
el viaje en carro siete horas por las autopistas del Estado a setenta millas por hora. Pero esencialmente por la razón que es para nosotrosa la más importante de todas. De nuestro perrito shih poo Mohamed Ali del no nos separamos
ni un minuto de las veinticuatro horas del día. Al pobre Alí no lo pudímos llevar entonces porque el parque estaba como lo está en la actualidad abierto a la vida salvaje y por ello sus administradores evitan la presencia de perritos caminando por ahí para evitar ataques de
cualquier otra especie animal que en el parque abunda. A tal prohibicion a la presencia del mejor amigo del hombre se ofrece la opción de
poder solicitar previamente un cupo para hospedarlo en una guardería protegida de todo peligro, en un lujoso hotel de primera categoría
donde personal especializado lo cuidan por todo el tiempo de duración de la visita de sus dueños. Sobra
decir que la tarifa por día es tan costosa al bolsillo y que por ello duele más
cualquier ataque de animal salvaje.
Ayer Salimos a
las 2 a.m. para ocupar el mayor tiempo posible en recorrer el parque que tiene 3.023
kilómetros cuadrados de extensión, no sin antes haber dejado nuestras más
apreciadas pero estrictas instrucciones para el cuidado de Ali que quedó a
cargo de Juliana, nuestra nuera que llegó de Colombia hace un par de días y que
es portadora de mi nieto, hijo de mi hijo Alejandro y del que sabemos con anticipación
que es varón. Y como el viaje es pesado para su estado, mi esposa y yo pensamos
que era mucho mejor que ella se quedara en casa protegida por Alí al que
solicitamos su beneplácito, que se nos dio sin ninguna dificultad.
En la aventura
nos acompañó María Fernanda mi hermana menor a quien fuimos a recoger a su mansión
y quien nos sugirió que mejor viajáramos todos en su vehículo Toyota, un suburbano prácticamente
nuevo y muy cómodo.
En California
existe el sistema vial más grande y extenso del mundo. Es además el Estado más populoso
de la nación, que está poblado por cincuenta millones de habitantes, en donde
se reúnen en un arcoíris de colores, todas las razas del mundo.
Las autopistas
405, 110, 101 y la 5 son las se deben tomar para ir a Yosemite.
Ellas se
orientan al norte del Estado donde se encuentra el famoso parque.
Comenzamos entonces
abordando la autopista 405 sin creer que se presentaría tropiezo alguno, pero como siempre ocurre
cuando pensamos con el deseo, nos encontramos con que a la altura de Sepúlveda
Bulevar, en Lancaster, la autopista tenía taponadas entradas y salidas con
señales de reparaciones por todas partes y por ello en carteles extras anunciaban
que el uso del servicio de la autopista en ese tramo estaba suspendido por todo
el día. Sin embargo nos daban alternativas de usar un desvío que definitivamente
tomamos. Lo extraño fue que las desviaciones anunciadas por los grandes carteles
que indicaban entradas alternas al norte, nos decían equivocadamente a qué
alturas encontraríamos la misma autopista 405, porque después de dar muchas
vueltas las nuevas entradas extrañamente nos devolvían al mismo lugar, es decir
a la salida de Sepúlveda. Sin ninguna explicación porque a esa hora de la
madrugada no había un solo ser humano a quien preguntar por eso nos vimos
obligados a tomar las calles hasta recobrar la orientación al norte después de
haber perdido una hora de viaje.
Pero una vez
dimos de nuevo con el 405 Norte, comenzamos el recorrido observando lo poco que
se capta de la Ciudad de Los Ángeles a 75 millas por hora, es decir a toda
velocidad.
El poco panorama
que se puede observar con la obligada mirada rápida es muy limpio, en especial porque
es igual en la generalidad de cualquier otro Estado del país si lo comparamos
con la propuesta arquitectónica del estilo moderno californiano, que en las
áreas Urbanas lo incluye todo. Lo que significa que cada parte de cualquier ciudad
americana, es decir como las de los otro cincuenta Estados, la mayoría están delimitadas
por sus respectivos Departamentos relacionados con los permisos de construcción
que cada Estado debe cumplir en lo relativo a las normas de desarrollo urbano
que le dan vida a cada Condado que entonces cuenta para los interesados en
comprar sus viviendas o locales en esos territorios, con áreas urbanas para
vivienda, librerías, almacenes de venta de computadores de todas las marcas y
sus respectivos programas, Bancos, zonas comerciales e industriales, ventas de
carros y camiones y todo lo que se refiere al comercio industrial que en E.U.
ofrece más de tres millones de productos. Además de oficinas de impuestos,
estaciones de policía y Agencias del Condado, almacenes de ventas de equipos industriales de
construcción de toda clase de vías y calles, tambien almacenes de ferretería y de suministro de
materias primas. Empresas que prestan servicios de hotelería y renta de
vehículos variados de todo tipo, porque cada pequeña ciudad del condado se tiene que alistar con servicios de drenaje de alcantarillas, luz teléfonos y de
conservación de parques y calles y para crear empleo público y privado para los
que van a vivir en ellas.
Entonces nos vamos
distanciando del Condado de los Ángeles transitando por los bordes de sus
afueras donde se pueden observar las inmensas áreas de cultivos de frutas,
repollos, verduras en general, de las famosas e inmensas plantaciones de
naranjas ombligonas y de todo tipo, las dulces mandarinas, los enormes limones
verdes y amarillos, los pequeños pero mantequillosos aguacates, los viñedos
para la industria que extrae el vino californiano de sus uvas, las arvejas,
zanahorias, al lado de los cuales se cuida el ganado de carne y leche que nos
alimenta y en fin lo que se cultiva a lo largo y a cada lado del camino hasta
que finalmente llegamos a Yosemite a las 10:15 de la mañana. (Continuará)
No comments:
Post a Comment